¿Tiempo de reaccionar, convergir o buscar una voz alternativa?
Costa Rica es un país en donde, aunque parezca mentira, los ciudadanos hablamos de política mañana, tarde y noche, los 365 días del año; lo mejor es que siempre tenemos la solución ideal a cualquier problema, ya sea nacional o internacional, sin importar nuestro partido político ni la ideología que practiquemos.
Los universitarios pertenecientes al sistema superior público costarricense, no estamos exentos a esta norma política nacional; recientemente los estudiantes de la Universidad Nacional de Costa Rica, celebraron de forma democrática sus elecciones para la FEUNA; ahora, es el turno de los estudiantes en la Universidad de Costa Rica y es aquí donde nace un problema que trae consigo una pregunta importante para todo aquel joven que sea estudiante de este centro académico: ¿reaccionamos, convergimos o buscamos una voz alternativa?
Como dicen por ahí, “cada cabeza es un mundo” y teniendo una fe ciega en esta frase, podríamos deducir que cada estudiante tendrá su respuesta a esta pregunta; sin embargo, no quisimos dejar pasar esta oportunidad para compartir nuestra respuesta con ustedes.
Si convergimos o votamos por Convergencia, estaríamos decidiendo continuar con la misma procesión en la que nos encontramos desde hace ya cuatro años consecutivos, y a la cual preferimos no tachar de “buena o mala”, simplemente deseamos catalogarla como desapercibida, esto porque los logros no se observan y siguen existiendo algunas dudas con los dineros destinados para el beneficio de los mismos estudiantes. El trabajo de cuatro años debería reflejar en la buena teoría, obras que se construyen sólo teniendo cuatro años de tiempo y financiamiento; sin embargo, nosotros sabemos cuál es la realidad de lo anterior.
Si por el contrario, buscamos una Voz Alternativa, estaríamos aceptando de forma automática que una voz poco inclusiva y representativa (la cual sería sólo la de los estudiantes opositores al TLC) tenga el derecho de hablar en nombre de todos (as) los (as) estudiantes de la U.C.R., silenciando las voces de los defensores de dicho tratado y lógicamente, dejando de lado un sistema democrático, en el cual, todas las voces poseen el derecho de ser escuchadas.
Somos respetuosos de los opositores al T.L.C., pero, en una eventual FEUCR en manos de esta voz, es válido preguntar ¿en dónde quedamos los que en nuestro sano derecho, simplemente opinamos de una forma diferente?, y lo más preocupante quizás, ¿por qué en lugar de proponer la formación de un frente de lucha en contra del T.L.C., no se propone la formación de un frente de apoyo para el mejoramiento de los beneficios, facilidades, pero sobre todo, necesidades de los estudiantes de la Universidad de Costa Rica?
No deseamos que se nos interprete con la sencilla idea de que la FEUCR debe estar desinteresada de los problemas, acontecimientos o decisiones nacionales, y mucho menos tener una participación inactiva en estos asuntos, todo lo contrario, pero tampoco podemos olvidar que la FEUCR existe para solucionar los problemas del estudiantado universitario, principalmente.
Finalmente, tenemos la opción de Reaccionar con un movimiento cuyas propuestas son realistas, concretas y denotan un interés real por hacer un cambio en pro de la población estudiantil universitaria. Un movimiento totalmente inclusivo en donde su formación e integrantes provienen de diferentes grupos juveniles, y en donde se ha demostrado un liderazgo sano y bien orientado, siempre con la visión de servir y hacer lo mejor por los demás.
Creemos fielmente que la Universidad de Costa Rica, al ser un centro de estudios de los más importantes a nivel nacional debe poner en práctica lo que se aprende en todo centro educativo: pensar. Pero no basta con pensar y no poner las manos a la obra, de ahí lo importante de actuar. Dicha actuación debe siempre encontrarse relacionada con el pensamiento para buscar que el resultado de esta combinación sea reaccionar de forma positiva.
Se debe buscar el partido más completo en todo sentido, una vez localizado, la tarea de todos (as) nosotros (as) es ir a las urnas el 23 y 24 de octubre y emitir nuestro voto, voto que esperamos sea sin duda alguna inteligente y que haga ganar al partido que busque una participación sana de la FEUCR en el ambiente nacional, pero también que se preocupe por arreglar las necesidades y los mil y un problemas de los estudiantes de la Universidad de Costa Rica, que al final de cuentas, fueron los que eligieron a dicho grupo de personas (llamado FEUCR) para que resuelvan todas las deficiencias.
Seamos parte de la solución y no del problema. A votar este 23 y 24 de octubre por una mejor FEUCR, por un mejor centro de estudios, por una mejor Universidad de Costa Rica.
Mariela Herrera Castro
mariela.herreracastro@ucr.ac.
Ignacio Fernández Víquez
jose.fernandezviquez@ucr.ac.cr